Damos la gloria a Dios por ese mover del Espíritu Santo tan fuerte en la convención.El Señor se hizo presente en los cultos, dando como resultado, bendiciones abundantes, corazones renovados, personas siendo sanadas y otras llenas del Espíritu Santo, y muchas otras cosas de las cuales estamos seguros que hay muchos testimonios.
Como está escrito en su palabra, Dios sigue siendo el mismo de ayer, hoy y por siempre, y seguirá cumpliendo esa promesa tan grande en Joel 2:28-29 "Y después de esto derramaré mi Espíritu sobre toda carne, y profetizarán vuestros hijos y vuestras hijas; vuestros ancianos soñarán sueños, y vuestros jóvenes verán visiones. Y también sobre los siervos y sobre las siervas derramaré mi Espíritu en aquellos días".
No hay comentarios:
Publicar un comentario